El Deiro logra el ascenso tras derrotar al Bamio por la mínima

El vicepresidente provincial, José Juan Durán, felicitó a jugadores y directiva al acabar el partido

Deiro 1

Bamio 0

Deiro: Diego, Iván, Dani, Xandro, Santiago, Víctor Manuel, Flecha, Jorge, Torrado, Joaquín y Toñi. También jugaron: Johan, Rubén y Yago.

Bamio: Marcos, Maga, Cholo, Isaac, Jorge, Chona, Macuto, Cano, Diego, Nico y Alberto. También jugaron: Germán, Jacobo, Rafa, Castro y Pascual..

Goles:

1-0 m. 58: Joaquín.

Árbitro: Ramiro Cea, del Colegio de Pontevedra. Amonestó a Iván, Dani y Torrado por los locales y a Cholo, Chona, Cano y Alberto por los visitantes. Expulsó con roja directa a Toñi por parte local y Maga por parte visitante.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de liga disputado en el campo Monte da Lomba . Ambientazo y lleno absoluto.

CARLOS M. VIEITES > vilanova El Deiro logró con toda justicia y en su último partido de liga en casa, el ascenso de categoría ante el Bamio, su gran rival durante toda la temporadada, al derrotarlo por uno a cero y ante un público entregado que creó un ambientazo excepcional llenando las gradas de color, música y fiesta.

El partido enfrentaba a los dos gallitos de la categoría y únicos candidatos al ascenso. El Bamio tenía que ganar para depender de sí mismo y arrebatarle así al Deiro tal premio. Pero no era el día del Bamio. No tocaba. Era y fue el día del Deiro, de su presidente, Venerando Fontán, de su entrenador, Ricardo Dios, de los veinticuatro jugadores de la plantilla, de la directiva que lleva trabajando, y mucho, en estos últimos años y de una afición ejemplar que allá a donde se desplazaban aportaba su parte de este fantástico ascenso. El partido fue del Deiro, siempre un paso por delante de su rival, con un Joaquín soberbio, su visión de juego y sus constantes centros medidos eran un dolor de cabeza para la defensa rival. Al descanso se llegó con tablas a pesar de que el Deiro merecía más. En la reanudación la puesta en escena del Deiro seguía siendo mejor, Flecha pudo marcar pero perdonó, pero en un balón sin dueño, dentro del área visitante, Joaquín hizo acto de presencia para cruzar un zapatazo que valía el ascenso. Un gol que luego dio paso a una gran fiesta, acorde al éxito logrado

 

  ERROR  ARBITRAL

  El penalti más largo ya es historia

El Deiro tuvo que esperar cuatro días para alcanzar la semifinal de la Copa Diputación. El árbitro se equivocó en el recuento de la tanda y ayer se tuvieron que lanzar otras tres penas

 

Fecha 13/6/2008

La eliminatoria de cuartos de final de la Copa Diputación que protagonizaron el Combarro y del Deiro pasará a los anales de la historia del balompié pontevedrés. Uno creía haberlo visto todo en el mundo del fútbol, pero el deporte rey y las lagunas legales que suelen convivir con él no cesan de sorprender. Así, los de Vilanova de Arousa tuvieron que esperar cuatro días para acabar de lanzar los penaltis y así certificar su clasificación.

El error fue a nivel comarcal, pero hay que recordar que hace unos días un tanto del holandés Van Nistelroy a Italia hizo temblar los cimientos del estamento arbitral internacional al cuestionarse su validez. Al parecer un futbolista lesionado fuera de la línea de fondo también sirve para romper la posición de fuera de juego. Ese es un precedente muy grave porque a partir de ahora los más listos de la clase tienen una opción más para hacer de las suyas al poder sacar provecho de la falta de deportividad.

Pero lo realmente trascendente es lo que ocurrió en Poio. Como si se tratara de una película humorística de Santiago Segura, el árbitro se erigió en protagonista al dar por finalizada la eliminatoria en el séptimo penalti de la tradicional tanda de diez.

El Combarro y el Deiro cerraron los dos encuentros con igualada y como los tantos marcados fuera de casa no valen doble en esta competición hubo que llegar a las penas máximas. Los locales fallaron su cuarto lanzamiento con el resultado de 1-2 a favor de los de Vilanova de Arousa. Quedaban tres lanzamientos, pero el trencilla se equivocó y dio por clasificado al Deiro. Eso fue el pasado domingo. El lunes, el Combarro presentó una reclamación y la federación decidió que había que seguir lanzando las penas máximas. La cita era el jueves a las 20.30 horas en el mismo escenario y en toda la semana no se habló de otra cosa en las tertulias futbolísticas comarcales.

Máxima expectación

Ayer la expectación fue máxima. La polémica se vivió desde minutos antes de que se reanudara la tanda. Los representantes del Deiro se quejaban de que el reglamento de la competición obligase a todos los componentes de los equipos a estar sobre el terreno de juego. Los futbolistas locales lo afrontaron como un entrenamiento más, pero los de O Salnés vocearon contra la normativa porque por culpa de ella tuvieron que pedir entre una y dos horas libres en el trabajo para cumplir con el trámite.

Los protagonistas no estuvieron listos hasta cerca de las nueve de la noche. La tensión se palpaba en el ambiente mientras el colegiado contaba los pasos preceptivos para situar la pelota en el punto de penalti. Johan tuvo en sus pies la clasificación de su equipo para las semifinales, pero su lanzamiento se estrelló contra la base del poste derecho de la portería. Los aplausos, las risas y el cabreo se entremezclaron entre los cerca de cincuenta testigos. El penalti más largo había pasado a la historia.

Sin embargo, a diferencia de la película que protagonizaba Fernando Tejero, el conocido portero de Aquí no hay quien viva , hubo otras dos oportunidades.

El Combarro aprovechó el regalo y Salva situó el marcador en 2-2. Pero la emoción apenas duró unos segundos porque Toni Morgán enmendó el error de su compañero y dio por finiquitada la tanda de penaltis cuatro días después de su inicio. Ahora le espera el Caroi en las semifinales de la Copa Diputación.

Y menos mal que fue así porque con un nuevo error del Deiro se podría haber montado la marimorena. De hecho, su presidente venerando Fontán y el técnico Ricardo Dios aún se quejaban amargamente del mal trago que tuvieron que pasar por la reclamación del Combarro, que entienden que fue totalmente absurda e injustificada